martes, 26 de enero de 2010

La escritura, la Historia y la memoria

Me llamó la atención el fragmento y nunca está de más compartirlo:

Y con esta natural ynclinacion que los hespañoles an tenido de seguir las armas y aborrescer las letras, a venido que an muerto haziendo notables hechos y diziendo excelentes dichos, y no a avido en Hespaña quien con la escritura les perpetue su memoria. Los griegos, despues que en Grecia huvo emperadores, sabian mucho dezir y poco hazer, y los romanos hast la declinacion del ymperio hazer y dezir, mas los hespañoles de antes y agora hazer y no decir. Los antiguos romanos la gran fama que oy tienen, tanto y mas fue por los excelentes libros que escrivieron, como por los hechos que hizieron. Si en Italia entre los romanos avia diez excelentes capitanes, qei con la lança andavan en la guerra, quedavan en Roma veynte excelentissimos hystoriadores qeu con la pluma escrevian sus hechos en la paz. No es mas valiente Hector de lo que quiso escreuir la pluma de Dares phrigiano; no fueron mas poderosos los griegos de lo que escrivió Homero; ni tenemos por mas ardid en la guerra á Archiles de lo que escrivió Ditis de Creta: no sabemos que navegó mas mares Eneas de las que Virgilio quiso dexar escritas de su mano: ni devió ser mayor la conquista de Alexandro de lo que Quinto Curcio quiso dexar por memoria; y si estos hystoriadores no escrivieran, como escrivieron, los hechos de estos Principes, que les aprovechara su valentia y esfuerço para que su fama no quedara en perpetuo olvido, y ansi ni dellos quedáran loores, ni á cabo de tantos millares de años tuvieramos, como tenemos dellas, tan fresca memoria.

[Ilustraciones de la Casa de Niebla, Pedro Barrantes Maldonado, 1541, Edición de la Real Academia de la Historia, 1857, Prólogo, pp. 5-6]



Caray, ¿será que sólo tenemos una impresión sobre el pasado?




viernes, 15 de enero de 2010

Haití

La naturaleza a veces es demasiado bárbara, pero los seres humanos podemos serlo mucho más que ella. Leo múltiples notas de prensa y columnas de opinión en los periódicos sobre el desastre en Haití. Todo el mundo recuerda que se trata de un país extremadamente pobre. Pero, Haití ya era un país pobrísimo, Puerto Príncipe ya era una ciudad más pobre de lo que la dignidad humana puede aguantar antes de este terrible terremoto. La catástrofe del hambre deambulaba por sus calles diariamente antes de él. Me pregunto, ahora que lo hemos recordado, ¿cuánto tardaremos en olvidarlo de nuevo?

viernes, 8 de enero de 2010

El libro del caballero Zifar


(Libro del Cavallero Zifar, Biblioteca Nacional de París)
Y porque este libro nunca apareció escrito en este lenguaje hasta ahora, ni lo vieron los hombres ni lo oyeron, cuidaron algunos que no fueran verdaderas las cosas que y se contienen, ni hay provecho en ellas, no parando mientes al entendimiento de las palabras ni queriendo curar en ellas. Pero comoquiera que verdaderas no fuesen, no las deben tener en poco ni dudar en ellas hasta que las oigan todas cumplidamente y vean el entendimiento de ellas, y saquen ende aquello que entendieren de que se puedan aprovechar; ca de cada cosa que es ya dicha pueden tomar buen ejemplo y buen consejo para saber traer su vida más cierta y más segura, si bien quisieren usar de ellas; ca tal es el libro para quien bien quisiere catar por él, como la nuez, que ha de parte de fuera fuste seco y tiene el fruto escondido dentro.

(El libro del caballero Zifar, Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes)